Sorpresa, sorprasia

Ayer comenzó la Copa de Asia. Existe un gran porcentaje de posibilidades de que para muchos de los que estéis leyendo esto, esta sea la primera noticia que tenéis de ello. Sin ir más lejos en webs de diarios deportivos de referencia, como MARCA, AS o SPORT, no hay ninguna referencia al respecto. Probablemente es porque ayer ocurrieron una gran cantidad de cosas, de enorme repercusión, que hicieron imposible encontrar un hueco para hablar sobre el inicio de esta competición.





Aunque también existe la posibilidad de que no fuera esa la causa. A lo mejor es, simplemente, que este torneo no tiene de cara al público la trascendencia que pueden tener otros, como por ejemplo la Copa África, Eurocopa, Copa América, o el Gamper. Entonces, aprovechando un semáforo en rojo, me paré a pensar las razones por las que hablar de la Copa Asia no interesa.


En primer lugar pensé en los participantes. Puede que no resulte interesante por que a la gente no le atrae lo suficiente ver partidos de ciertos equipos. Total, ¿quién conoce a Marko Suler? ¿Alguien se ve capacitado de decirme en que equipo juega Nikita Rukavytsya? ¿Qué posición ocupa Marcel Ndjeng? ¿Cuál es la pierna buena de Lance Davids? Ahi está el quid de la cuestión. Todos coincidiremos en que la falta de información sobre estas selecciones, nos dificulta empatizar con ellas, y esto nos provoca nuestra falta de interés, ¿verdad? Claro, esta es la causa... Misterio resuelto, entonces ¿no? ¡AJÁ! ¡Habéis caído! Estos jugadores juegan con Eslovenia, Australia, Camerún y Sudáfrica, respectivamente, y no parece que nos causará demasiada molestia ver el Mundial, ¿no? Miraos... Debería caérseos la cara de vergüenza.


Una vez, descartada mi primera teoría, decidí ir con la segunda. Yo soy así, ordenado. El morbo. Luis Fabiano con Diogo, Burdisso con David Navarro, Zidane con Materazzi, Eto´o con Bostjan Cesar... Multitud de golpes, patadas y peleas con jugadores de muchas nacionalidades, pero ni rastro de asiáticos. ¡Por supuesto! Esta es la razón. En el fondo, todos observamos fútbol porque esperamos poder ver en algún momento alguna bestialidad. Somos así de simples. "Brillante, voy a escribir una tesis al respecto" me dije. Y fue entonces cuando recordé aquel Beijing Guoan - Young Lions.





Completamente hundido y desesperado, cuando estaba a punto de dar mi brazo a torcer, y reconocer que el misterio de la Copa Asia quedaría para siempre en el limbo junto a otros, como la identidad del asesino de Kennedy, las construcciones de las pirámides de Egipto o la carrera como entrenador de Mariano García Remón, terminé por ver la luz. Tan simple... Estaba en frente de mis narices todo este tiempo. Cuando estás deseando ver una película y alguien te cuenta su final, deseas liquidarle. Sí, te atrae el film pero, todos coincidiremos en que saber como va a terminar le quita gran parte de interés. A todos nos gusta que nos sorprendan. Lo atractivo de lo inesperado. Era tan evidente...


Si no has captado el mensaje del post, en absoluto te has sentido identificado con nada de lo expuesto, sabes que ayer Uzbekistán le ganó a Catar 2-0, y deseas seguir viendo como se desarrolla la Copa de Asia ¡ojo! Spoilers.