domingo, 4 de julio de 2010

Lionel Missing

Un uruguayo, un holandés, un alemán y un español. No pegan ni para un chiste, pero son los cuatro finalistas del Mundial.

Diego Armando Maradona dijo hace dos días que estarían en la final "si Dios quiere" y que iba a querer. Yo de ser Maradona o Kaká, me replantearía muchas cosas. Alemania le marcó 4 a Argentina. El primero de ellos, a los dos minutos, obra de Müller. Que digo yo, a veces dan ganas de creer en el destino, ¿no?:



A estas alturas no vamos a descubrir al pulpo Paul, pero desde "Resultado Injusto" hemos hecho una gran investigación en torno a la figura del octópodo (que tiene que ser considerado como algo más que "animal de compañía" por el Tabú a estas alturas). ¿Cómo puede ser posible que haya acertado todos los resultados de Alemania hasta ahora? A estas alturas hay dos vías de pensamiento. Están los que piensan que solo espera a que Mick Jagger abra la boca para decidirse y por otro lado los que mantienen que el pulpo Paul era la mascota de la mujer de Neutrex Futura que venía del futuro trayendo un detergente y que todo esto ya lo ha vivido. No se si algún día se llegará a una conclusión definitiva, pero tendrá que ser pronto...


Sí amigos, lo ha vuelto a hacer.

Por cierto, desde Brasil se vivió como un mazazo la eliminación de Argentina, como equipo sudámericano que es. Es un hecho evidente. No hace falta más que ver la portada de Globo Esporte, un diario brasileño:



Tras este golpe dado sobre la mesa por los teutones, muchos ven a la selección germana como favorita. Nada nuevo. Todos sabemos que el fútbol es un deporte en el que juegan 11 contra 11 y siempre ganan los aleman-polaco-turco-tunecino-ghanés-nigeriano-hispano-brasileño-bosnios.

En el último partido de cuartos de final, salió victoriosa España ante Paraguay. El resultado fue de 1-0 tras tirarse tres penalties en el partido. Muy significativo.

Paraguay disfrutó de la primera pena máxima. La disparó Cardozo, jugador del Benfica, equipo que se enfrentó en cuartos de final de la UEFA al Liverpool. En esa eliminatoria, el paraguayo le marcó dos goles de penalty a Pepe Reina. El portero del Liverpool le dijo a Casillas donde lo iba a tirar y acertó. Victor Valdés no se siente integrado.

Sí. Iker Casillas fue decisivo en el partido. Pero ¿qué puede ocurrir, si España llega a la final del Mundial y la gana en la tanda de penalties, con un pleno de paradas del mostoleño?



Estos dos resultados tienen varias consecuencias. Evidentemente, voy a obviar todas aquellas que puedan tener alguna importancia, y me voy a fijar en aquellas que no nos aporten nada de utilidad. ¿Estamos hablando del primer Mundial, descaradamente asexual? Bilardo prometió que si Argentina ganaba, iba a dejarse "hacer la colita" (que no es hacerse una trenza, precisamente) por el que hiciese el gol de la victoria. No voy a entrar a discutir lo motivador que pueda resultar eso para un jugador. También Maradona dijo que si ganaba el Mundial, se desnudaría y daría vueltas sobre el Obelisco. Esto lo entendí más, ahora muchos argentinos están fastidiados por quedar eliminados, pero si te paras a pensarlo a veces es peor el remedio que la enfermedad. Y por último, Larissa Riquelme prometió que... bueno, en Paraguay tiene que hacer un calor...

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